En noviembre de 2006 un grupo de jóvenes de Villalba y otros pueblos de la Sierra, empezaron a limpiar y adaptar el espacio de lo que hoy es el Centro Social Okupado Autogestionado La Fábrika de Sueños, que ahora está amenazado de desalojo. Estos jóvenes, que contaban con el apoyo del Foro Social de la Sierra, la Asamblea por la Vivienda Digna y otros movimientos sociales (como relataban en su primer comunicado), ocuparon unos antiguos talleres, cuyas instalaciones y cuya propiedad no estaban registrados, y por los cuales, desde hacía decenas de años, nadie pagaba el impuesto de bienes inmuebles, ni las tasas municipales. Sobre esos talleres existía, y existe, la sospecha de que están sobre un terreno de propiedad pública, dentro del dominio ferroviario, en los que se situó una empresa que realizó trabajos en la electrificación de la línea de ferrocarril desde 1935, y que, además, pudieron quedar contenidos en la nacionalización de los ferrocarriles del año 1941, cuando se creó RENFE. Más aun, sobre esa zona el Plan General de Villalba preveía actuaciones urbanísticas (la apertura de una calle) que tendrían que haberse concluido, a más tardar, en septiembre del año 2002 y que nunca fueron iniciadas, sin que el Ayuntamiento procediera, como correspondía, a la expropiación de los terrenos. Ni el Ayuntamiento, ni los que hoy reclaman su propiedad (la multinacional de la construcción ACS, antes Dragados, presidida por Florentino Pérez) se preocuparon de unos terrenos que carecían de uso privado o social, de un espacio que no dejaba nada a la ciudadanía, en ningún sentido. La okupación rescató para todos/as, y especialmente para los/as jóvenes de la Sierra, unas naves abandonadas y unos patios llenos de basura, que eran un núcleo de insalubridad e inseguridad para los vecinos y para los que por allí circulaban. A pesar de esto, La Fábrika sufrió un fuerte acoso e incluso un intento de derribo ilegal, el 26 de enero de 2007, sin orden de desalojo y sin licencia municipal, amparado por cinco coches de la Policía Local de Villalba enviados por su alcalde. Desde entonces ha continuado el hostigamiento contra este ejemplar Centro Social, especialmente por parte del alcalde de Villalba, sus concejales y el PP. Pero La Fábrika ha logrado sobrevivir y los sueños se han hecho realidad tras un trabajo inmenso de centenares de jóvenes, una gran entrega militante y una resistencia ejemplar. Casi cuatro años después, lo que antes era un espacio abandonado y degradado es hoy un ejemplo de participación, responsabilidad, democracia, pluralismo y creatividad. Desde su tiempo libre, sin subvenciones, en función de sus decisiones asamblearias y con un proyecto alternativo, los jóvenes de nuestra Sierra han consolidado un sueño que desmiente tópicos.
Durante todo este tiempo, en la Fábrika se han llevado a cabo cientos de actividades culturales, sociales, políticas y deportivas. La Fábrika se ha convertido en un espacio vivo donde de manera autogestionada, se han realizado encuentros de movimientos sociales, charlas sobre inmigración, en defensa de la sanidad pública, en contra de la especulación y el deterioro del medio ambiente, en apoyo a los pueblos palestino, saharaui, kurdo, mexicano… Se han hecho talleres de fotografía y video, de manualidades, de música, de Tai chi, de danzas, de horticultura y jardinería… Se han realizado ciclos de cine, videoforums, conciertos solidarios, teatro y espectáculos cirquenses… Se reúnen colectivos de autoformación y debate sobre temas como el capitalismo, el racismo, el machismo, la ecología y los recursos naturales... Se ha acondicionado un espacio para los niños y las niñas del barrio… Se ha puesto en marcha una nave destinada al arte y la creación, otra que sirve de local para ensayos musicales, una zona en la que se ha construido una escuela de boxeo, otra donde se ha construido un rocódromo y bulder para practicar la escalada… Se han hecho partidos de fútbol, grafitis, huertos, seminarios, conciertos, fiestas, exposiciones, teatro, circo... La Fábrika es un espacio siempre abierto a los movimientos sociales, colectivos culturales y asociaciones de la Sierra, por la que han pasado cientos de vecinos de nuestra sierra.
Todas estas actividades han contribuido a crear un espacio de debate y ocio en la Sierra alejado del consumismo, que potencia la fraternidad, el apoyo mutuo y la intención de dar un sentido más humano y menos materialista a lo que nos rodea. Valores que pretenden ser puestos en vías de extinción en nuestra sociedad, por ser tan molestos en un sistema que sólo se basa en la búsqueda del beneficio económico. Y ahora quieren desalojar y derribar este espacio a través de un “juicio rápido”, que amenaza con poner fin al proyecto en septiembre próximo.
Por todo esto los abajo firmantes, movimientos sociales, grupos culturales, musicales, deportivos y otras agrupaciones, grupos políticos y personas de la Sierra, anunciamos nuestra decisión de respaldar activamente las movilizaciones y los recursos contra el desalojo y derribo de La Fábrika y manifestamos:
-Nuestra solidaridad con los compañeros y compañeras del Centro Social Okupado Autogestionado La Fábrika de Sueños, especialmente con aquellos a los que se está multando y encausando.
-La denuncia de la especulación urbanística, de los especuladores y de los “servidores públicos” que actúan en función de los intereses de los grandes capitales.
Y, finalmente, planteamos que el Ayuntamiento de Villalba debe proceder a recuperar esos terrenos para el dominio público, proteger los edificios de los talleres, por su valor como arqueología industrial ferroviaria, y permitir que en ellos siga funcionando el Centro Social con sus características actuales.
Firma el manifiesto en defensa de la fabrika en el blog de apoyo (para firmar hacer un comentario en el blog):